La cruel verdad detrás de la leche

6 de marzo

Aunque es una creencia popular: una vaca no da leche todo el tiempo. En realidad las vacas solo dan leche para alimentar a sus crías. Por ello, son inseminadas a la fuerza para iniciar el ciclo de producción de leche.

Según MIDAGRI, en el Perú hay 905.817 vacas en ordeño (2021). Y las zonas más productoras del país son Cajamarca (18.37%), Arequipa (16.79%) y Lima (16.57%).

La cuenca de Lima es la que tiene la mayor cantidad de crianza intensiva.

En un año, alrededor de 1.8 millones de toneladas de leche fresca son obtenidas para satisfacer el consumo peruano. Sin embargo, muchos desconocen que detrás de esta industria hay sufrimiento animal que también puede generar daño al medio ambiente y a los humanos.

Impacto en las vacas

Los embarazos continuos en las vacas por las inseminaciones artificiales generan que ellas

se descalcifiquen y sufran enfermedades relacionadas. Por ejemplo, muchas vacas suelen sufrir de mastitis, una enfermedad iinfecto-contagiosa de la glándula mamaria que se da por el mal manejo o estado del animal.

Otra enfermedad muy común en vacas lecheras son las que afectan sus cascos. Agentes patógenos se instalan en las pezuñas, los huesos, los ligamos y las articulaciones generan dolor.

Los repetitivos embarazos traen consigo enfermedades del tracto reproductivo. Entre la segunda y la tercera semana tras el parto, las vacas son susceptibles a padecer alguna infección, debido a que su sistema inmune es más vulnerable. Algunos ejemplos son: metritis, endometritis clínica y secreción vaginal purulenta.

Impacto en el medio ambiente

Según la FAO, el ganado vacuno (carne y leche) es el mayor emisor de gases de efecto invernadero con alrededor de 5,0 gigatoneladas de CO2-eq, que representan el 62% de todas las emisiones de otras especies.

En el Perú, MIDAGRI afirma que las praderas alto andinas están siendo degradadas por el pastoreo y mal manejo. La sobrecarga corresponde a tres veces más animales que su capacidad. Tampoco se maneja racionaliza el pastoreo para su conservación en los meses de escasez.

Impacto en las personas

Como la salud animal, del medio ambiente y de los humanos está conectada, la explotación de alguno de estos tres factores genera daño. Las vacas cuando se enferman pueden contagiar sus patalogías a las personas que consumen su carne o leche.

En el Perú, una persona puede enfermarse de Brucelosis o fiebre malta. Algunas personas tienen brucelosis crónica y tienen síntomas durante años. La bacteria Brucella puede afectar a cualquier parte del cuerpo, incluidos el sistema reproductor, el hígado, el corazón y el sistema nervioso central.

Otras patologías que se pueden presentar con el consumo de leche contaminada son la Equinococosis, el ántrax y tuberculosis.

La única leche esencial para la vida de los humanos es la leche materna. Al crecer, no necesitamos de los lácteos para tener huesos fuertes u obtener calcio. Existen alimentos que nos ayudarán a cubrir este mineral. Ahora que sabes esta información, te invitamos a que hagas un cambio en tu estilo de vida para garantizar la salud de todos: humana, animal y del medio ambiente.

 

“La única leche esencial para la vida de los humanos es la leche materna”.

 


Receta vegana:

Galletas de mantequilla de maní

Una receta sencilla y rica para preparar galletas que puedes enviarles en la lonchera de tus hijos.

Ingredientes:

  • Húmedos

    3 cucharadas de mantequilla de maní

    1 cucharada de panela

    1/3 de taza de leche vegetal

    1 cucharadita de esencia de vainilla.

     

  • Secos

    1 taza de harina integral o de avena

    1 cucharadita de polvo de hornear

    Frutos secos picados o chocolate bitter. (opcional)

Preparación:

1.Agregar en un bowl la mantequilla de maní, la panela, la leche vegetal y

la esencia de vainilla, y revolver bien, hasta que todos los ingredientes

estén bien integrados.

2. Añadir las harinas, la avena, el polvo de hornear. Con la espátula hacer

movimientos suaves en forma de reloj, luego agregar el chocolate y

los frutos secos. Seguir revolviendo hasta que la masa pueda ser

manipulada con las manos.

3. Engrasar un molde o fuente y precalentar el horno a 180 grados.

4. Hacer bolitas del mismo tamaño, aplástalas ligeramente con un tenedor.

5. Llevarlas al horno durante 15 minutos.

6. Dejar enfriar las galletas y disfrutar con leche vegetal.

Escrito por:
Escrito por:Patricia Castañeda
@nunaqumir
Directora de Investigación
y Políticas Alimentarias