Navidad: la realidad de los pavos en el Perú
25 de diciembre
Más de un millón y medio de pavos han muerto en el Perú para celebrar las fiestas navideñas, así lo indicó el Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego (MIDAGRI).
Los pavos nacen solo para ser comidos en las fiestas de fin de año, viven toda su corta vida en espacios reducidos que no les permiten ejercer sus comportamientos naturales. Las densidades en un galpón es de 6 pavos hembras por m2; y 3.2 pavos/m2 para los machos.
Estas aves pueden vivir 10 años, como un perro o un gato, pero para que el negocio sea rentable, viven entre 78 a 80 días hasta llegar a los 6 kilos, o de 128 a 140 días para llegar a pesar 18 kilos.
Las hembras se destinan a la producción de pavos enteros y se desuñan, es decir, se les corta la última falange del dedo medial, esto tiene como objetivo disminuir los problemas de piel por rasguños, y atacarse entre ellas.
Los pavos criados en las granjas industriales desconocen una vida natural. En estos lugares el objetivo es que crezcan rápido para animorar costos, ejerciendo un confinamiento perverso y mutilaciones dolorosas. Los pavos son animales muy sociables, pero al estar hacinados los vuelve violentos, algo que no es natural entre ellos.
El estar confinados también genera que sean víctimas de enfermedades tales como Histomoniasis, Hexamitiasis, Cólera aviar y Tricomoniasis. Deben ser medicados con antibióticos y antiparasitarios, pero muchas veces no pueden salvarse y al morir deben ser retirados de los galpones para evitar que se ejerza canibalismo.
En el Perú, se puede comprar un pavo congelado o uno vivo, y pedir que lo maten en el momento. Este acto normalizado puede traer consecuencias para la salud humana. Al tenerlos en lugares insaludabres se convierte en un riesgo de enfermedades zoonóticas que ponen en riesgo al consumidor.
Existen muchas opciones libres de crueldad más nutritivas y económicas. Que estas fiestas nos traigan paz a todos.
Alimentación:
¿Cómo reemplazar el huevo?
Por: Ernesto Acosta, Bachiller en Nutrición
Uno de los aspectos más desafiantes de la transición a una dieta vegana puede ser encontrar alternativas a los alimentos de origen animal que se consumen con mayor frecuencia. Uno de estos alimentos es el huevo, que es un ingrediente común en muchas recetas y que, por lo tanto, es necesario reemplazar de alguna manera.
La transición hacia una dieta vegana es cada vez más común y puede tener importantes beneficios éticos y de salud. Uno de los principales beneficios éticos del reemplazo de los huevos en una dieta vegana es que evita la explotación animal. Las gallinas que producen huevos comerciales suelen vivir en condiciones muy pobres y tienen una vida muy corta. Al reemplazar los huevos en una dieta vegana, se evita apoyar a esta industria y se protege a las gallinas de la explotación. A menudo, las gallinas que ya no son productivas se destinan a la industria de la carne, lo que significa que sufren el mismo tipo de explotación y muerte que cualquier otro animal de granja. Al dejar de consumir huevos, se evita apoyar a esta industria y se protege a las gallinas de esta suerte de destino.
El reemplazo de los huevos en una dieta vegana también tiene importantes beneficios para la salud. Los huevos contienen altos niveles de colesterol y grasas saturadas, lo que puede aumentar el riesgo de enfermedades del corazón y otras enfermedades crónicas. Al reemplazar los huevos con opciones más saludables, como frutas, verduras, legumbres y cereales integrales, se puede reducir el riesgo de estas enfermedades y mejorar la salud en general.
Afortunadamente, hay muchas opciones de origen vegetal disponibles para reemplazar los huevos en preparaciones veganas. Una de las más populares es el tofu, que es muy versátil y puede usarse en muchas recetas diferentes. El tofu se puede triturar y mezclar con otros ingredientes para crear una consistencia similar a la de los huevos y se puede usar para reemplazar los huevos en recetas de tortillas, omelettes y otras preparaciones.
Las semillas de linaza también son una buena opción para reemplazar los huevos, ya que se pueden mezclar con agua para formar una especie de gel que se puede usar en muchas recetas. El plátano maduro triturado,el agua de garbanzos y el yogurt vegano también son buenas opciones para reemplazar los huevos en muchas recetas dulces, como los panqueques, bizcochos, galletas, brownies, etc.
Por último, es importante tener en cuenta que cada opción de reemplazo de huevo puede funcionar mejor o peor en diferentes recetas, así que es posible que tengas que experimentar un poco para encontrar la que mejor se adapte a tus necesidades. Además, es posible que tengas que ajustar otros ingredientes o la cantidad de líquidos en la receta para que quede bien. Con un poco de práctica y paciencia, encontrarás la opción de reemplazo de huevo que mejor se adapte a tus necesidades y te ayude a disfrutar de un estilo de vida vegano.
Receta vegana:
Quinua tapada
Ingredientes:
- 100 g carne de soya
- 1 taza de quinua cocida
- 1 cebolla
- Ajo molido
- Ají panka
- 1 tomate
- Perejil
- Sal y pimienta al gusto
Preparación:
1. La soya texturizada se remoja durante 20 minutos en agua caliente para que se hidrate y elimine el polvo.
2. Se prepara un aderezo de ajo, cebolla en cubos y ají panka molido.
3. Se agrega la carne de soya y se deja hasta que se forme una masa.
4. Se añade tomate picado y se deja en la sartén a fuego lento.
5. Con un molde, se coloca una capa de quinua, una del guiso y otra de quinua. Se coloca unas hojitas de perejil como decoración